sábado, 1 de mayo de 2010

Cómo evaluar un material didáctico??

Recursos para el aprendizaje II
sesión 11 300410

Llamamos materiales didácticos a las diferentes herramientas o utensilios que utilizan los docentes y losalumnos en el desarrollo del proceso de enseñana/aprendizaje. Unos tienen un carácter globalizados, articulante y orientativo de todo el proceso (materiales curriculares, libros de texto, por ejemplo) y otros son elementos vicarios, de carácter auxiliar (ordenadores, material de laboratorio, retroproyectores, diapositivas, etc.) Los materiales no son un fin en sí mismos, por lo que ya desde aquí estamos refiriéndonos a un criterio de valoración que no se encuentra exclusivamente en su calidad sino en el modelo de enseñanza que se persigue, en la finalidad a la que se los destina, en el modo de utilizarlos y en las repercusiones que su uso conlleva. En definitiva, solamente su uso.
Es necesario tener siempre presente que en el material didáctico, se establece la interacción entre los contenidos, el docente y el estudiante, por lo que, su propósito fundamental es que el estudiante adquiera determinados aprendizajes. El material didáctico es el recurso que ha sido diseñado con todos los elementos para ser autosuficiente, es decir, para que no necesite la mediación en persona del docente, sini que el niño al interactuar con él por sí mismo logre el acercamiento al conocimiento que se quiere brindar.
La evaluación del material didáctico es un proceso continuo, multifactorial que nos permite tomar decisiones acerca de los medios de enseñanza aprendizaje y de su efectividad.
En este sentido, la evaluación se plantearía algunas cuestiones determinantes.
— Nivel de concreción de los materiales (que conlleva un grado de autonomía de criterio para el profesor).

— Nivel de obligatoriedad de las orientaciones o prescripciones de los materiales (que conlleva una autonomía funcional).

Disponer de materiales que explicitan claramente los objetivos, los contenidos, las actividades, los ejercicios de control con sus correspondientes correcciones(complementados con otros materiales de actividades para el verano, con su libro del profesor para que éste se ahorre el tiempo de la búsqueda y tenga la seguridad de la respuesta correcta), es un modo de cercenar la autonomía curricular.
Pueden servirnos de guía los doce principios que Raths (1971) ofrece para la valoración de las actividades en el desarrollo curricular. La potencialidad didáctica de los materiales estaría centrada en las siguientes características:

— Que permitan al alumno tomar decisiones razonables respecto a cómo utilizarlos y ver las consecuencias de su elección.

— Que permitan desempeñar un papel activo al alumno: investigar, exponer, observar, entrevistar, participaren simulaciones, etc.
— Que permitan al alumno o le estimulen a comprometerse en la investigación de las ideas, en las aplicaciones de procesos intelectuales o en problemas personales y sociales.

— Que implique al alumno con la realidad: tocando, manipulando, aplicando, examinando, recogiendo objetos y materiales.

— Que puedan ser utilizados por los alumnos de diversos niveles de capacidad y con intereses distintos, propiciando tareas como imaginar, comparar, clasificar o resumir.

Centrándonos en la evaluación de medios didácticos, cuando se evalúan unos materiales se puede hacer para saber cuáles tienen más información sobre un tema, cuáles son los mejores desde un punto de vista técnico, cuáles son los más adecuados para unos estudiantes determinados, etc. Y por otra parte los destinatarios de esta evaluación pueden ser los docentes, los diseñadores de materiales didácticos, los administradores de las instituciones educativas...

En cualquier caso, los criterios que se utilicen deben estar de acuerdo con la intencionalidad de la evaluación y con los destinatarios de la misma.

Por otra parte, cuando consideramos la evaluación de los medios didácticos, uno de los criterios que siempre suele estar presente es el de la eficacia didáctica, Es decir, su funcionalidad como medio facilitador de aprendizajes. Como la eficacia didáctica al utilizar estos materiales depende básicamente de dos factores, las características de los materiales y la forma en la que se han utilizado con los estudiantes, suelen considerarse dos tipos de evaluación:

- La evaluación objetiva, la cual se centra en valorar la calidad de los medios didácticos.

Generalmente la realiza un especialista a partir de un estudio exhaustivo de las características del material, sin que intervengan los destinatarios finales del medio didáctico. No obstante, en ocasiones, cuando las editoriales de materiales didácticos o determinadas administraciones públicas e instituciones académicas quieren hacer una evaluación en profundidad de un producto, los materiales son utilizados y valorados por diversos especialistas y destinatarios finales del producto.

En cualquier caso, la evaluación suele hacerse a partir de la consideración de unos criterios de calidad que se concretan en unos indicadores que se pueden identificar en mayor o menor medida en los materiales que se evalúan.

-La evaluación contextual que valora la manera en la que se han utilizado los medios en un contexto educativo determinado.La máxima eficacia didáctica con el uso de los medios en un determinado contexto educativo se conseguirá utilizando adecuadamente materiales didácticos de calidad.

Referencias
PÉREZ, A (2002)."Elementos para el análisis de la interacción educativa en los nuevos entornos de aprendizaje". Revista Pixel-Bit, 19, pp. 49-61"

SANZ, Mercè (2000)."Experiencia educativa: factores de calidad y NNTT". Comunicación y Pedagogía, 164, pp. 65-71"

MARQUÈS GRAELLS, Pere (2000)."Criterios de calidad en los programas educativos". Revista MasPC, núm.8, pp. 218-219"